Una careta que se va a la mierda
Ron
salió de la habitación con la cabeza aun torturándolo, y con la curiosidad a
flor de piel de saber quién demonios había sido la mujer con la que se había
ido a la cama, lo único que podía decirera que su cuerpo no estaba nada mal,
ya que la sabana dejaba muy poco la
imaginación.
Con
cuidado de no hacer ruido rodeo la cama para ver el rostro de la misteriosa
chica. Cuando logro apreciar las facciones de la muchacha un escalofrió corrió
por su espalda, y al instante pasó su mano desde su cara hasta el final de su
cabello.
—Malditasea…
—Susurró antes de comenzar su rápida retirada intentando encontrar su ropa completa.
Sus
zapatos en una esquina, el bóxer al pie de la cama, los pantalones en la muerta
y como supuso su camisa a mitad de pasillo, sin descontar su teléfono celular y
billetera junto a la chaqueta del smoking que había usado la noche anterior; ni
siquiera se molestó en buscar el corbatín o dejar una nota, ya había hecho un
desastre y no pensaba buscar otro.
Caminó
rápidamente hacia la salida donde sacó su teléfono celular y marcó el número de
Hermione, por primera vez haría el trabajo de una asistente.
***
Hermione
acababa de tomar el transporte público cuando su teléfono comenzó a sonar de
forma insistente. Se le hacía complicado sacarlo de su bolso, así que decidió
dejarlo simplemente sonar, pero cuando por sexta vez se hizo escuchar no tuvo
otra opción que buscar aquel fastidioso aparato.
Tras
una búsqueda algo desesperante, al fondo, el aparato que seguía sonando fue a
parar en su mano.
Ronald Weasley
Rezaba
en la pantalla.
—
¿Pero qué demonios? —Susurró para misma mientras atendía— ¿Ronald?
—
¿Dónde estás? —Escuchó la voz azorada de su interlocutor.
—Camino
a la universidad… ¿Sucede algo?
—Hermione espero la respuesta pero una sarta de palabrotas salió de la
boca de Ron hacia el trafico mismo.
—Sí,
sucede todo, te necesito ahora —Ron hablaba de forma imperativa, olvidándose de
su horario de trabajo.
—Ron
aunque quisiera no podría, hay un tráfico horrible, y mi universidad queda al
otro lado de la ciudad con respecto al plató, ¿no puedo ayudar en la tarde?
Tengo clases a las que asistir. —Hermione escuchó una sonora maldición desde el
otro lado del teléfono.
—Hermione
te necesito ahora, iré a tu universidad si es necesario. —Hermione arrugó el
entrecejo y miro su reloj, tendría al menos veinte minutos para verlo antes de
clases.
—Está
bien, pero solo unos minutos, luego iré
a mis clases.
—Bien,
bien, como sea, estaré ahí en unos minutos.
La
comunicación se cortó antes de que Hermione pudiese decir nada más.
***
Luna
caminaba con la sonrisa más plena que se le podría haber visto en años, aun con
el vestido de la noche anterior y con Rolf Scamander a su lado sosteniendo un
vaso de café.
—Por
eso no la recordaba, ahora se de quien hablas… —Dijo chasqueando los dedos
cuando Luna le mostró la foto de Hermione en su celular— Ella es la chica que
mi jefe lleva a todos lados.
—
¿No sabias sus nombre? —Preguntó la rubia frunciendo el ceño.
—Sí,
lo sabía, pero no la había asimilado como la asistente de Ron, no lo sé. —Después
de haber hablado con Luna toda la noche, Rolf recordaba casi como algo pasajero
su pequeño impasse con el pelirrojo
por Hermione en la fiesta.
—Al
menos ahora sabes… —Se hizo un silencio incomodo, que Rolf pensaba se debía a
la falta de temas de conversación, pero cuando intentó decir algo, Luna habló
al mismo tiempo, y él haciendo gala de caballerosidad le dio la palabra— Lo
siento… —Dijo la chica por la anterior interrupción, a lo que él volvió a negar
restándole importancia— Tengo curiosidad, ya me has dicho que estudias para ser
médico, y que eres amigo de Draco Malfoy, de hecho conozco a tu familia… Pero… ¿Cómo
llegaste a ser actor de películas para adultos? —Luna bajó la cara con
vergüenza por su intromisión.
—Tenía
cosas que pagar, como muchos, y un amigo me presentó a Ron, y ahí estaba esa
oportunidad que daba tanto dinero, y que al menos para un hombre es fácil. —Torció
el gesto comprendiendo que esa no había sido una descripción realmente acertada
de lo que hacía— Con el tiempo asumes lo que haces como un arte, y si, me ayuda
a seguir pagando mi independencia, y no te mentiré diciendo que todo fue fácil,
muchas veces me sentí como si me estuviera vendiendo, pero cuando veía el
resultado final, me gustaba, y terminó siendo para mí, como la medicina, la
diferencia es que puedo mostrarle a mis padres el diploma de médico, pero no el
pene de oro que gané por actor revelación del año —Rolf quiso restarle
dramatismo a lo que había dicho anteriormente con la historia del premio, y lo
logró, ambos rieron sonoramente, siendo objeto de la mirada de algunos
transeúntes.
—Debo
ver ese pene de oro. —Inmediatamente después de haber dicho aquello, Luna se
llevó las manos a la cara— ¡Lo siento! No quería decir eso.
Rolf
tenía las cejas alzadas y una gran sonrisa de incredulidad, pero comprendía
perfectamente a que se refería la chica.
—No
te preocupes, te lo mostrare, el de… Oro —Rió imponiendo el chiste, y la chica agradecío
que el chico no fuese un cretino completo.
***
Cuando
Hermione llegó a la universidad, Ronald la esperaba caminando de un lado a
otro a un costado de la puerta
principal.
—
¡Hasta que al fin llegas! —Dijo con las manos en alto.
—
¿Qué sucede? —Dijo la chica tomándolo por el brazo y apartándolo de la vista de
la gente.
—Anoche
me metí en problemas, me acosté con una
loca… —La mirada de Ron era completamente martirizada, pero no evitaba que
Hermione lo mirase como si estuviese demente.
—
¿Cómo se supone que yo podría solucionar tu “problema”? — Hermione utilizó las comillas, al tiempo
que colocaba cara de indiferencia.
En
el fondo, sintió cierta molestia, por un lado, un día le decía que quería tener
sexo con ella a como diese lugar, y unas horas después escapaba a acostarse con
otra mujer; por un instante sentido ganas de dejarlo allí, con su problema y
sin solución.
—Tu
eres mi asistente, te quedaras con mi teléfono celular, ese lo dejare para
trabajo, y hoy mismo comprare otro, que sólo lo tendrás tú y mis más cercanos,
si Lavender llama dile que estoy ocupado, o que no estoy, lo que sea, yo
hablare con Mike para que no deje pasar a nadie.
—Así
como lo hiciste conmigo aquella vez hace
un par de semanas. —Afirmó la chica generando que Ron intentase responder, no
obstante, no lo dejo— Yo tengo una sola pregunta señor Weasley, ¿si ésta chica
intenta meterse en su cama, cómo haremos Mike y yo para detenerla?, debo
contratar a alguien que le cuide el sueño también.
Hermione
hablaba con cierto peso de reproche e ironía en su voz, le fastidiaba que Ron
intentara librarse de esa pobre chica usándola a ella, o al menos así pensaba
de Lavender.
—Hermione
eso es distinto, además, ella es la
razón por la cual tu eres mi asistente ahora, y lo que pasó anoche fue un
completo error, estaba bastante feliz por una noticia, y tomé de mas, ella
simplemente se metió en mis pantalones. —Ron estaba ofuscado— ¿A ti jamás se te
ha ido la mano con unos tragos?, bueno, a mi si señorita perfecta.
Hermione
enarco una ceja y extendió su mano hacia Ron para que le entregara su teléfono.
Ronald sonrió y la miró como si fuese la mejor del mundo y le entrego el
aparato.
—
¿Si llama alguien distinto a esa chica que le digo? —Preguntó la castaña.
—Dile
que eres mi asistente, guarda el recado y me lo das en la tarde en la oficina,
o en su defecto le das el número de la oficina. Lavender ya sabe ese, pero le diré
a Seamus que esté al pendiente de el por si ella llama.
—Un
equipo Swat de protección. —Susurro Hermione, haciendo que Ronald colocara ojos
en blanco.
—Está
bien, suéltalo Hermione, di lo que sea que quieras decir. —Ron puso las manos
en su cintura mirándola fijamente.
—Bien,
es solo que tú vas, te acuestas con ésta pobre chica, y luego huyes de ella, y
me usas para esconderte como un cobarde… ¿Al menos te cuidaste?, no quiero ser
la mujer que separó a un niño de su padre sabes. —Dijo con dramatismo.
Ron
exhalo una sonrisa, y luego la miro.
—En
primera sí, estoy huyendo, y si quieres decirme cobarde, bien, cuando debas
tratar con ella me comprenderás, puedo apostar a que ya tiene nuestro futuro
planeado. —Ron alzó un segundo dedo frente a ella— Dos, tú no sabes lo que me
ha hecho, y anoche realmente me quise resistir, pero estaba muy ebrio, y sé que eso no lo justifica, no soy hombre
de hacer eso, pero paso, y tres —Ron terminó su conteo acercándose a Hermione
con un último dedo alzado— Eres tonta, sin importar que tan enajenado esté,
siempre uso protección, no soy un irresponsable, además, la única mujer con la
que no quiero usar preservativo, la tengo frente a mí. —Aquello ultimo lo dijo
con todo el peso de su mirada sobre Hermine y casi susurrándoselo directamente
en los labios.
Hermione
sintió el aliento del pelirrojo tan cerca que casi pierde la compostura, y
estaba segura que de no estar en una vía publica, se le hubiese hecho casi
imposible, pero luego recordó la pequeña aventura de su jefe y retrocedió de un
salto.
—Te
habías tardado, me voy a clases. —El pelirrojo sonrió al verla marchar a
grandes zancadas, y luego de que
desapareciera puertas adentro, dio media vuelta y montó en su auto.
Hermione
iba completamente ofuscada y acalorada, Ronald jamás había estado tan cerca de
ella, casi siente perder los estribos, y lo que más la preocupaba era el hecho
de que ni siquiera pensó en Cormac, el pasaba como un pensamiento aislado.
En
su camino al aula de clases entró al sanitario de mujeres donde se mojó la
cara, repitiéndose una y otra vez una
mentira a modo de mantra.
—No lo querías besar, no lo querías
besar, no lo querías besar, Hermione.
***
Cormac se encontraba tomando un café y
viendo las noticias matutinas desde la cocina de Hermione cuando su teléfono
vibró mostrando la fotografía de Bellatrix en la pantalla.
—Hola
Bella… —Dijo al atender.
— ¿Le gusto el regalo a
la sosa? —Cormac
movió la cabeza de un lado a otro enarcando una ceja por el celoso apodo que
Bella le había puesto a Hermione.
—Más
que eso, le encantaron, lo que realmente siento es que no los disfrute a
plenitud, piensa que son fantasía. —Bellatrix rio estruendosamente del otro lado,
generando que el rubio apartara el teléfono de su oreja.
—Idiota, pero en fin,
recuerda ir hoy a su trabajo y ser el novio perfecto, o la volverás a perder.
—Despreocúpate,
pensaba hacerlo, ese tal jefe quiere algo con ella y no se lo pienso permitir.
—Yo que tú, se la
regalaría, pero en fin, es tú vida.
—Sí,
es mi vida. —Dijo secamente el rubio— ¿Qué pasó con Snape? —Ese era un tema que
realmente si le preocupaba.
—No sé dónde está,
después de la última vez no he vuelto a
tener noticias suyas, al parecer está fuera de la ciudad y Dumbledore no me ha querido
decir nada, dudo que lo haga.
—Malditasea,
como sea, me avisas si sucede algo, adiós Bellatrix.
—Adiós precioso.
—Cormac puso los ojos en blanco y trancó la llamada.
Sobre
la tarde, Ron se encontraba dirigiendo una de las últimas escenas de la
película que Rolf y Astoria estaban llevando a cabo, se encontraba muy
concentrado con Hermione a su lado, haciendo señas y colocándose detrás de las
cámaras que necesitaba más cerca o más lejos, de hecho le había pedido al mismo
Rolf jugara un poco con ellas.
Hermione
se encontraba realmente atenta a lo que sucedía, todo era más técnico de lo que
ella había pensado, incluso al parar la escena, maquillaje y utilería se ponían
manos a la obra, Ron actuaba como si estuviese curando el cáncer y de vez en
cuando no podía evitar reír por ese
hecho; pero nada quedaba del coqueto Ronald de los días anteriores, no prestaba
atención a nada más que no fuese lo que pasaba delante de él.
Era
la primera vez desde que trabajaba con Ronald, que realmente veía el proceso de
creación, y en eso estaba cuando su teléfono vibró y se alejó del área donde
los chicos grababan.
—
¿Qué sucede Cormac? —Dijo al ver la imagen de su novio en la pantalla.
—He
venido a buscarte, ¿puedes decirle al guardia que me deje pasar? —Hermione vio la hora de su, y con mucha confusión
respondió.
—Está
bien, pásamelo por favor. —Del otro lado Cormac extendió el móvil a Mike.
—
¿Señorita Granger? —Preguntó el chico.
—Sí,
Mike por favor déjalo pasar, es mi novio.
—Explicó la chica.
—Bien,
señorita Granger. —La comunicación se
cortó y Hermione se golpeó la frente con la palma de la mano.
La
castaña caminó a paso apresurado hasta donde Ron terminaba de felicitar a Rolf
y Astoria, por el trabajo que habían hecho, y tomándolo por el brazo lo halo
hacia ella.
—Lo
siento chicos, ya se los devuelvo. —Ambos la miraron y sonrieron, colocándose
las batas.
—
¿Qué pasa? —Preguntó el pelirrojo ante la insistencia de la castaña.
—Cormac
acaba de pasar la vigilancia. —Dijo sin rodeos.
—
¿El petardo de tu novio? —Ron solo quiso asegurarse, pero ya tenía la mandíbula
completamente tensa.
—Si…
—Contestó simplemente— Ha venido a buscarme.
—Pues
tendrá que esperar, hoy te necesito hasta tarde. —Era falso, pero la retendría
solo por dañarle el día a rubio.
—
¿Por qué? Preguntó la chica sin entender
muy bien el asunto.
—Hermione,
aún hay contratos en la mesa que tienes que almacenar, y por si eso fuera poco
yo mismo debo quedarme a ver como quedaron las escenas de hoy para la
posproducción. —Explicó enumerando con sus dedos.
—Tú
jamás haces eso… —Afirmó la chica con las manos en la cintura.
Antes
de que Ron pudiese replicar Cormac Mclaggen se acercaba acompañado por Dean
Thomas, que le había mostrado el camino. Frente a los ojos de Ron el rubio tomó
a Hermione por la cintura y le dio un beso bastante profundo ante la energúmena
mirada del pelirrojo, que solo se volteó y caminó hacia donde Rolf y Astoria que
miraban con los ojos abiertos.
—Pensé
que seriamos los únicos haciendo pornografía el día de hoy. —Dijo Astoria.
Ron
movió su mano de manera brusca, dando a entender que no quería hablar del tema.
—Vale
—Dijo la chica— Pero a mí también me van visitar hoy.
—Otro
cretino… —Aseveró Ron sin cortarse.
—No,
es Draco Malfoy, el… Amigo de Rolf. —Rolf la miró socarronamente ganándose un
manotazo en la nuca.
—Bien,
ya veré como sacarme a éste idiota.
—
¿El tipo sabe que intentas quitarle a su novia? —Preguntó Rolf ante la perpleja
mirada de Astoria.
—Espera…
—Astoria se acercó aún más a los dos hombres y susurro— ¿Intentas meterte con
la chica? —Con un disimulado gesto la señalo.
—No,
el simplemente quiere una relación de tipo sexual con ella, sin engañar a
nadie. —Rolf había ironizado las palabras de Ron, generando que Astoria
enarcara las cejas.
—Paren
los dos, si, es verdad que quiero acostarme con ella, pero ese petardo es un
cretino, anoche mismo lo vi bastante cariñoso con la cumpleañera.
La
cara de ambos interlocutores fue de total sorpresa.
—Para,
ese tipo está con la tía de Draco. —Rolf había dicho el nombre del menor Malfoy
en un susurro, y como si lo hubiesen invocado, el chico apareció por el mismo
pasillo que Rolf había transitado un par de minutos antes.
Esa
aparición generó dos cosas, la primera, Cormac
que se encontraba con Hermione cerca de la puerta de la oficina de Ron,
se puso pálido, y no le quitó la mirada de encima desde que entró en el plató,
hasta que llego a donde se encontraban los tres actores reunidos. La segunda,
Ron que se encontraba en el otro costado miró instantáneamente a Cormac que no
se percató de nada, y de esa manera confirmó lo que había visto la noche
anterior.
Draco
saludó primero a Astoria, y luego a Rolf, por ultimo le dio la mano a un
sonriente Ron.
Si
alguien hubiese podido ver una analogía del momento, sería la de un depredador
mirando a su presa en círculos, porque para Ron, Cormac era una presa.
—Hablando
del rey de Roma. —Dijo Rolf.
—
¿Hablaban de mí?, Espero que bien, aunque con ésta chica nunca se sabe. —Draco
miró aAstoria y le regalo un guiño.
—Sí,
es que Ron nos estaba contando algo interesante de tu tía. —Ron no pudo evitar
sentirse algo nervioso, pero con un movimiento de su mano le dio a entender que
no había problemas.
—
¿Qué sucede con Bellatrix? —Draco jamás le había tenido mucho respeto con su
familia, así que no le daba demasiada importancia, pero si le interesaba cualquier cosa con la
que pudiese mantener a sus padres a raya, sobre todo a Lucius.
—Después
de lo que me has contado, seguro te puede interesar. —Dijo Astoria —Dile Ron.
—Creo
que el tipo que está allá con mi asistente, disimula al voltear. —Draco volteo
para hacerle una caricia a Astoria en la mejilla, y con su vista periférica
identifico al rubio junto a la chica que Ron decía, luego asintió—Bien, creo
que está saliendo con tu tía a escondidas, y él es el novio de mi asistente.
Draco
enarco una ceja y asintió con una sonrisa.
—Ya
decía yo que Bella no podía haber vivido tantos años con Rodolphus sin al menos
una aventura, gracias por el dato.
Ron
asintió, sabiendo que al menos el rubio tendría un par de ideas para
perjudicarle el rato a Cormac.
—Bien,
voy a fastidiarle el momento a ese imbécil, con permiso. —Ron se inclinó un
poco y dejo a los tres mientras caminaba en la dirección de Hermione.
La
castaña quien había mirado solo un par de veces la reunión que se llevaba cabo entre Ron y los otros tres, se alejó un
paso de Cormac cuando el pelirrojo se acercó
bastante más imponente de lo normal, la castaña lo sentía como si estuviese
marcando sus dominios y por un momento tuvo ganas de reír.
—Bien,
lamento interrumpir, pero la idea es que tengas esos documentos preparados
mientras yo reviso en posproducción el trabajo de Astoria y Rolf. —Ron hablaba
solo mirando a Hermione, mientras ignoraba a Cormac de forma olímpica.
—Está
bien. —Hermione fue seca a la hora de dirigirse a él, pues sabia su juego y no
pensaba entrar en él.
Cuando
se dispuso a entrar en la oficina de Ron para trabajar, y Cormac la siguió, el
pelirrojo avanzó un paso colocándose en la puerta, impidiendo que el rubio
pasara.
—Disculpe,
entiendo que usted es una visita de la señorita Granger, pero en ésta oficina
solo entra personal autorizado, siento incomodarlo. —Ronald que había cruzado
sus brazos sobre el pecho se veía grande e imponente, y definitivamente dejándole
saber que estaba en su espacio, ante un Cormac que no se quedaba atrás, igual
de alto, el rubio levanto la cabeza
frunciendo el ceño y mirando al otro de manera rabiosa y amenazante dejando
claro que no se dejaría intimidar.
Hermione
volteo en el momento justo en que la tensión se podía ver en el aire, de hecho
por un segundo pensó que ambos se enzarzarían en una pelea. Cormac tenía los
ojos abiertos de par en par por la rabia y las aletas de la nariz dilatadas,
mientras Ron, aun en su pose, como una estatua lo miraba directamente a los
ojos, y con un aviso claro en la mirada.
Astoria,
Rolf y Draco, miraban la escena tensos, los dos hombres preparados para intervenir
si se requería. Sin embargo el silencio que se prolongó por unos segundos, las
miradas y las mandíbulas en tensión cesaron cuando Cormac asintió lentamente.
—Bien,
solo esperare aquí afuera. —Ronald asintió y volteó a mirar a Hermione, que no
solo estaba tensa, sino encolerizada por la actitud del pelirrojo, que a sus
ojos era injusta, pero prefirió callar.
Ronald
salió caminando a grande zancadas hacia el área de posproducción, donde no
pensaba revisar nada, sino quitarse la rabia que le hervía en la sangre.
Hermione
se encontraba almacenando los documentos que el pelirrojo le había pedido,
mientras aun le picaban las manos por al
menos dejarle una buena bofetada a Ron.
—Sera
idiota. —Susurraba para ella misma, mientras colocaba los documentos de mala
gana en el archivador.
Cuando
ella pensaba que lo peor del día había pasado, un golpe seco y la voz de Cormac
se alzó en el aire.
—
¡Perra! —Hermione espantada reacciono por la misma adrenalina, y casi saltando,
abrió la puerta de golpe viendo a Cormac con la mano en su mejilla y a una Astoria
totalmente descolocada, y como si de un deja vu se tratara, la mirada de Ron y
la de él se encontraron, pero está vez Draco Malfoy reacciono primero y se fue
contra Cormac seguido de Ron, para terminar con un Rolf que acababa de aparecer
y estupefacto intentaba que ambos hombres soltaran al rubio.
Hermione
que apenas había reaccionado corrió hacia ellos, interponiéndose entre Ron y
Cormac cuando éste se preparaba para volver a golpear al rubio, mientras Rolf hacía
lo propio con Draco.
—
¡Calmate Ronald! —Le gritaba Hermione a Ron ante la mirada de varias personas
de la producción que comenzaban a llegar para ayudar.
—Y
una mierda, éste hijo de puta se llevó el premio de la lotería hoy. —Apartando
a Hermione sin lastimarla, se fue de nuevo contra Cormac, pero Seamus y Dean lo
tomaron.
Mientras
los dos hombres tomaban a Ron por los brazos y lo obligaba a sentar en el
suelo, Hermione se colocó delante de él.
—
¡Calmate de una vez! ¿Quieres ir preso? —Ron la miró durante un segundo, y
luego se deshizo de los brazos de Dean y Seamus.
—Por
librar a éste mundo de ratas como esas me voy al infierno, y tú —Dijo señalando
a Hermione— Si quieres seguirle creyendo a éste maldito, y haciendo que lo
respete bien, puedes seguir haciéndolo, pero al menos hoy de aquí no sales con
ese tipo.
Hermione
lo miró atónita, por la orden que le había dado Ron, y una vez más se dio
cuenta de que no se había preocupado por Cormac a sabiendas de que podía estar
mal herido.
—Es
mi novio Ron, no puedes darme esa orden. — Le aseguró a un Ron que ya se había
parado he iba hacia Astoria, seguido por Hermione.
—
¡Saquen a esa basura de aquí! —Grito a Dean y Seamus señalando a Cormac que
estaba medio inconsciente en el piso. —Ni se te ocurra moverte. —Ron sujetó a
Hermione por la cintura ante el constante forcejeo de la chica.
—
¿Ni siquiera te molestas en saber que le hizo a Astoria?, ¿Por qué no le
preguntas? , ¿Crees que éste chico que recién acaba de ver a ese hijo de puta lo
golpeo porque si? —Ron señaló a Draco que estaba siendo calmado por Rolf y
Astoria.
Hermione
cayó en cuenta de que realmente no sabía que había desatado aquel
pandemónium, y decidió calmarse y
acercarse a la chica.
—
¿Qué sucedió? —Hermione sintió vergüenza, porque sea lo sea que hubiese hecho
Cormac, debió ser terrible para que la chica y los dos hombres lo agredieran, además
ella misma había escuchado la voz de Cormac insultándola.
Astoria
miró a Hermione aun alterada.
—Lo
siento, pero ese tipo, tu novio, me ofendió, y cuando le he dado la bofetada,
volvió a insultarme.
Hermione
la miró aun con la confusión en la mirada, y Astoria fue más clara.
—Quiso
pagarme por sexo. —Hermione cerró los
ojos y tomó aire, con Ron aun a su lado sosteniéndole el brazo para que no
fuera detrás de Cormac.
—Yo…
Lo siento… No sé qué decir, que vergüenza… —Hermione no sabía cómo disculparse
con la chica—Cormac jamás había hecho
una cosa de esas, no sé qué le ha pasado.
—Ron, a su lado sonrió irónicamente.
—Serás
tonta. —Hermione lo miró con el señor fruncido.
—Ese
tipo te engaña. —Dijo como si fuese la cosa más obvia del mundo.
Hermione
lo miró y negó con la cabeza soltándose del brazo de Ronald.
—El
hecho de que haya hecho esto, y no lo disculpo, realmente no me opondría a que
Astoria lo denunciara, no quiere decir
que debas aprovecharte para sacar ventaja de esto.
—No
me estoy aprovechando, te digo la verdad, te engaña con la tía de Draco. —El
chico que estaba totalmente ofuscado junto a Astoria, miró fijamente a Hermione
por primera vez.
—Si
él tiene razón, me voy a encargar de joderle
la vida hasta que pida clemencia. —Draco había señalado a Ron, y luego mirado
de vuelta a Hermione— Y en el proceso sabrás si lo que te dice es verdad o mentira, pero a juzgar con lo
que acaba de hacer, yo que tú no me seguiría tapando los ojos.
Hermione
lo miró por un instante y asintió, de acuerdo con cualquier cosa que Draco
pensara hacer para demostrar que lo que Ron decía era cierto.
—Deberíamos
irnos, debemos curarte la mano Draco. —Rolf que
había estado casi como un espectador, tomo a Astoria por la cintura y a
Draco por los Hombros y los obligo a caminar.
—Astoria…
—Llamo Hermione.
—
¿Si? —La chica volteo y la miró sin rencor alguno.
—Si
quieres levantar cargos en su contra, te proporcionare sus datos, y seré
testigo de lo que pude ver, realmente no sé cómo disculparme contigo. —Hermione
bajó la mirada.
—Tú
de lo único que tienes la culpa, es de no creerle a Ron, despreocúpate Hermione,
y gracias por tu apoyo. Hermione asintió y los vio caminar, luego volteo a ver Ronald
que aún tenía la rabia marcada en las facciones, y fue en ese instante, cuando
bajó su mirada que se percató de la mano sangrante del pelirrojo.
—Señor…
—Se escuchó la voz de Seamus a sus espaldas.
—
¿Qué? —Ron parecía un autómata.
—Hemos
puesto al tipo ese en un taxi y lo han llevado a un hospital, pero su auto
sigue aquí, ¿Qué hacemos con él?
Ronald
iba a sugerir quemarlo y enviárselo en pedazos,
pero comprendió, que Hermione también se estaba llevando una buena
cantidad de malos momentos ese día, así que simplemente volteó a mirarla y le
dejo la decisión a ella.
—Hagan
lo que quieran con su auto me da igual. —Si Hermione no se había ido tras
Cormac, no era por la orden del pelirrojo, la razón real venia del hecho de
saber que Cormac no solo era un abusivo al haberle faltado el respecto a
Astoria, sino a ella misma, intentando pagar por sexo a una compañera de
trabajo, era bajo, y cruel—Mi relación con ese tipo se terminó hoy.
A
pesar de todo, guardaba la esperanza de
que lo que le había dicho Ron fuese una total mentira.
Seamus
asintió y salió del plató.
—Vamos
a mi casa, te curare la mano…—Dijo mirando al pelirrojo.
—No.
—Respondió él—No quiero que pienses que me quiero aprovechar de esto. —Las
palabras de Ron también habían sido un golpe dirigidas al comentario que hizo la
chica en el momento en que le dijo que Bellatrix y Cormac salían.
—Vendrás
a mi casa y se acabó, si te dejo aprovecharte o no de la situación es cosa mío
Ronald. —Ron la miró fastidiando y asintió.
Hermione
caminó hacia la oficina de donde sacó sus cosas y las de Ron para luego
encontrarse con él en el pasillo, para partir hacia el estacionamiento.
Cuando
ambos se encontraban dentro del auto, Ron apretó el volante aun con rabia.
—Será
mejor que sólo te deje en tu casa Hermione, de verdad.
—Porque
tengo rabia, porque quiero ir a mi casa,
tomarme un whisky y acostarme a descansar, no quiero ver a tu casero, ni a tu
amiga, tampoco las fotografías tuyas con ese hijo de puta.
—Entonces
iremos a tu casa, te curare la mano, luego te tomaras tu whisky y dormirás, yo tomaré
un taxi de vuelta. —Hermione no pensaba
recibir un no por respuesta.
—Y
tú pretendes que te deje ir a quien sabe dios qué hora, si vas allá, dormirás
en mi casa, y me da igual lo que digas.
—Bien
será así, no pienso dejar que tu mano se enferme, por culpa de Cormac. —Ron dio
un golpe seco al volante al escuchar su nombre y encendió el motor.
Hermione
no dijo nada más, se sentía culpable por lo que había pasado, y después de lo
que había hecho Cormac, no pensaba seguir guardándole un respeto, que él no le
daba a ella.
Hola
todo el mundo, he vuelto, como siempre no en las fechas que dije, pero no hice
promesas, y además estoy aun en rango jeje.
Como
habrán visto, Cormac ha recibido su merecido, y aún le falta, Hermione necesita
terminar de ver la clase de desgraciado que es.
Les
cuento que de aquí en tres o cuatro capítulos, la relación de Hermione y Ron va
a terminar de caer donde debe, la cosa es, que quizás no caiga tan bien, ya
veremos cuando lean.
Ahora
bien, quiero comentarles a todos aquellos que leyeron Reborn y les gustó, que
aquí, en el panel izquierdo, hay una encuesta, los invito a votar a ustedes y a
todos aquellos, que quieran.
Siguiendo
con los anuncios, les cuento que comencé a pasar ésta historia a original en
wattpad y Fiction press, la pagina hermana de Fanfiction, les pido su apoyo,
por favor; en el mismo panel que les había comentado antes, se encuentran los
links, así como el twitter y la página de Facebook, donde podrán escribirme y
saber todo lo que quieran, podrán preguntar cuando actualizo y dejar cualquier
tipo de comentario, sobre todo el twitter y también por ahí avisaré cuando monte capitulo aquí, así que estén atentas. Por todos esos medios estaré comunicándome con ustedes, y resolviendo sus inquietudes sobre las historias,
les pido su apoyo.
Bien
chiquilines, espero leerlos pronto, un gran saludo y gracias por seguir ahí. Las
respuestas a los review, en la etiqueta que dice respuestas, y también las
dejare por fanfiction en un par de días cuando monte el capítulo allí.
PD: Busquen al final donde dice entradas antiguas, les he dejado la nueva portada de Sexualmente complicado, y justo debajo de eso las respuestas a los review del capitulo anterior