- Ingland V12 -
-Buenos días- Fue lo primero que escuche esa
mañana al abrir los ojos; la voz de mi guardaespaldas quien me miraba
sonriente desde el mueble de mi
habitación.
-Buenos días- Respondí de igual manera,
ligeramente avergonzada por mi apariencia en la mañana; Vergüenza que cada vez
se hacia menos presente en los amaneceres junto a él.
-¿Qué tenemos para hoy?-
-tengo que terminar de ver las maquetas de la
publicidad, que Rita comenzó a mostrarme ayer , y prepararme para el evento de ésta
noche; tendré que acompañar a Luna para comprar vestidos nuevos…y tu debes
venir, para comprarte un esmoquin también- fue muy cómico la manera en que
arrugo la cara.
-¿esmoquin para mi?, ¿Qué tiene de malo mi
uniforme?-
-Eso precisamente, que es un uniforme, así que
luego de hablar con Snape, vamos a comprar ropa nueva-
-¿Qué tan caro sale eso?, No se si tenga efectivo
disponible hoy- Lo mire como no creyendo su pregunta.
-Por supuesto que no vas a pagar tu, eso cuenta
por parte de la empresa; vas a cuidarme, por lo tanto estarás trabajando, en
consecuencia va por mi cuenta, y fin del asunto- quise zanjar el tema ya que
sabia lo terco que podría ser con el tema económico.
-Vale, como tu digas-bufo.
Me levante de la cama y luego me puse la bata, me
acerque a él y le peine el cabello hacia atrás con las manos, estaba despeinado
por haber dormido.
-¿Hoy no te vas a asomar por la ventana?- El
maldito pícaro sonreía como si me supiera desprevenida.
-No, realmente no hay nada que ver que ya no halla
apreciado, quizás mañana si lo haga- Sonreí y me dirigí al baño para darme una
ducha, así podríamos irnos a la empresa rápido.
***
Para mi sorpresa Rita había hecho un esplendido
trabajo, cosa que para Snape también había sido algo nuevo, lo veía medio
sonreír de vez en cuando, mientras se estaba proyectando la cuña publicitaria.
-¿Qué tal?- Pregunto presumida.
-Has hecho un buen trabajo, y sin problemas
Skeeter, no tengo quejas, ahora solo falta que Severus haga los arreglos
legales y eso saldrá en cada pantalla que halla en Europa-
-Bien, ya me puedo retirar entonces-
-Si, recuerda que debes estar ésta noche en el
evento, ya la semana que viene hablaremos de cómo continuara tu trabajo dentro
de la empresa- Severus le hizo un seña de despedida y Skeeter salio de la sala
de reuniones.
-Se ha destacado- me comento.
-si, es un excelente trabajo, pero aun no le
aflojes la cuerda del cuello, que se siga sintiendo presionada- deje aun lado
la publicación que estaría en los periódicos en unos días; quería preguntarle a
Snape como iba su estudio sobre mi idea de expansión-
¿Severus has adelantado algo del informe que te pedí?-
-Si, pero aun no está listo, seguramente la semana
que viene estará en tu escritorio; aunque ahora te puedo adelantar, que es muy
viable la expansión hacia Latinoamérica- Una buena noticia con respecto a la
empresa, eso era algo.
-Genial, eso nos dará un campo de manejo
extremadamente amplio…Severus debo irme con Luna a buscar vestidos para ésta
noche, con tanto jaleo no he tenido la oportunidad de preocuparme de esas
cosas-
-Ésta bien, ve tranquila, yo también voy a estar
un rato mas y me voy- Me despedí de mi amigo con un beso en la mejilla y luego
salí de la sala.
Ron quien estaba detrás de mi, llamo a Luna con
una seña, ésta se levanto de su escritorio con su cartera y nos siguió.
-Vamos bajando- escuche a Ron alertar a Tonks y a
los demás que se encontraban en el estacionamiento.
-Esto de estar rodeada de guardaespaldas debe ser
la pega- me susurro Luna al oído tratando de que Ron no la escuchara, sin
embargo su intento fue en vano, ya que el pelirrojo hizo un ligero ademán de
carcajada que provoco el sonrojo de mi asistente.
-Si Luna, es muy genial siempre estar rodeada de
guardaespaldas- solté sin mucho recato, al fin y al cabo, aquello no era
cierto, si quizás la frase hubiese sido; si, es genial que Ron me cuide, seria
cierto.
Al llegar al estacionamiento abordamos el
automóvil saliendo a toda prisa de la edificación.
-¿A dónde nos dirigimos jefa?- Pregunto Tonks.
-Bond Street- ordene tajante.
-Recuerda Hermione que ni Tonks ni yo gozamos de
una inmensa cuenta bancaria como otras, quizás deberías dejarnos a nosotras en
un lugar un poco mas accesible a nuestro bolsillo- No pude evitar reírme ante
la desesperación de Luna por el futuro gasto excesivo.
-Hoy va por mi cuenta, para todos, vale- Tonks
sonrió como niño en juguetería cuando me escucho decir aquello.
-Amo mi trabajo, juro que lo amo- Ron soltó una
carcajada ante las palabras de Tonks que contagio a todos en el auto, incluso
al muy serio Nick.
Bond Street es una de las principales calles de
compras de Londres, atraviesa Mayfair desde Piccadilly en el sur, hasta Oxford
Street en el norte. Es una de las principales calles del distrito comercial del
West End, aunque las tiendas ubicadas en ellas son mas elitistas que las
cercanas a Regent y Oxford Street; allí era donde me sugería ir Luna, sin
embargo aquel era un regalo que les quería hacer a todos, se lo merecían por el
gran trabajo que hacían a diario.
Luego de bajar del auto, Ron, Tonks y Luna me
siguieron, dejando a los demás hacer su trabajo. Los guié hasta la tienda de
Armani en New Bond Street, allí tenia planeado comprar el esmoquin para Ron.
-Ronald como eres el mas fácil de vestir serás el
primero- Ron arrugo el seño y yo reí.
Dentro de la tienda una dependiente sumamente
elegante nos abordo; era una mujer joven, de cabello rubio y de lindas facciones,
más amable de lo que aparentaba.
-Buenos días, ¿puedo ayudarlos en algo?-
-Buenos días, vera necesito un esmoquin para mi
guardaespaldas, esta noche tenemos un evento importante y lo necesito lo mas
presentable posible- La mujer sonrió al divisar a Ron, como sabiendo
perfectamente lo que le quedaría.
-tengo lo que necesita, síganme por favor- seguimos
a la dependiente a través de un amplio pasillo de paredes blocas, mostradores
negros, y luces que hacían un efecto grisáceo.
En un aparador había un esmoquin sencillo, pero al
que se le veía la alta costura por donde se lo mirase.
-Te gusta ese o quieres uno mas arreglado-
-No, ese me gusta es sencillo, y…elegante- . Asentí
sin dudar, y la dependiente pidió bajarlo para que Ron se lo pudiera probara.
Luego de una hora de probar chaquetas distintas y
pantalones, conseguimos la combinación perfecta de tallas para mi
guardaespaldas, aunque yo no logre verlo completamente vestido, ya que se nos
hacia tarde y tuve que salir con Luna y Tonks hacia Channel que quedaba al otro
lado en el Old Bond Street.
Luego de un par de horas más, de dudas, y muecas
por parte de Ron quien ya se veía completamente harto de aquello, a diferencia
de mis dos amigas quienes se divertían como niñas en jardín de infantes logramos
salir de la tienda
Llevaba en la bolsa un vestido largo de tirantes
con el busto en negro y el resto en blanco, era bonito, aunque sencillo. Luna había
escogido un cóctel negro, y Tonks un vestido corto rojo, que según ella la dejaría
maniobrar si hubiese algún problema; Bromee con ella sobre comprar un liguero
de cuero que mantuviese en su sitio un cuchillo, a lo cual ella solo realizo un
obsceno movimiento con su mano.
Después de todo aquel desastre de bolsas, entramos
a un centro de estilismo donde unos grandes amigos nos dejarían completamente
peinadas, y listas solo de ponernos el vestido y salir para la fiesta; el único
problema era que no dejaban de mirar a Ron cada que caminaba de un lado a otro,
cosas que se repetía muy a menudo, se encontraba incomodo por las miradas.
-Dime que le gusto a tu niñero, y te juro que te
arreglo gratis durante un año- Reí ante el comentario fuera de tono de mi
estilista; debo admitir que lo adoraba, pero si Ron hubiese escuchado aquello
lo habría matado a golpes.
-Lo siento Geo, no creo que seas su tipo de
hombre- Bromee, y la cara de desilusión de mi querido y gay amigo no se hizo
esperar.
Un par de horas mas tarde, entraba a la casa
completamente agotada, pero lista para enfundarme el vestido y salir hacia el
lanzamiento.
-Hermione te voy a dejar al cuidado de Michael
mientras me cambio- ese era Ron quien debía
al igual que Tonks, y yo ponerse elegante para aquella anoche.
Además del vestido, también utilizaría unos
zarcillos de diamantes que mi madre me había regalado mucho tiempo atrás, pero
que eran hermosos sin lugar a dudas; por ultimo pero no menos importante, busque en mi vestier un cajón donde guardaba
todos los perfumes y fragancias, escogí de nuevo Armani para aquella noche.
Después de una ducha rápida, y cuidando mi
cabello, que aunque corto, recién peinado, me coloque cremas de baño con
perfume, luego el vestido, los accesorios, y la colonia. una vez lista salí de la
habitación preparada para todo.
Michael Corner que se encontraba fuera de mi
habitación sonrió al verme salir.
-Luce hermosa Hermione- sonreí sonrojada y acepte
su brazo.
Realmente no tenia prisa, a pesar de la
expectativa para aquella noche, sabía en lo más profundo de mí que algo pasaría,
tenia miedo de que esa fuera la última noche de mi vida, por ello, el apuro no
era un problema para mí. Quizás ese sexto sentido que tenemos las mujeres me estaría
avisando, pero como realmente no podía controlar nada, solo me quedaba confiar
en el equipo de seguridad y en Ron, quien venia saliendo del área de servicio
para pararse frente a las escalera, de donde yo descendía en ese momento.
-No tengo palabras para describirte en éste momento
Hermione, serian pocas- el halago de de Ronald llego en el momento en que yo no
solo apreciaba su esmoquin sino también la colonia que tenia puesta, estaba
completamente segura de que era de la misma marca de su traje, por esa razón le
sonreí sonrojada.
-Gracias…Por cierto, ¿compraste una colonia en la
tienda?-
-No, mi hermana me la regalo hace unos meses para
mi cumpleaños, así que como la ropa es de la misma firma, ¿porque no
usarla?...Que buen olfato tienes- Creo que esa seria la primera de muchas veces
en toda la noche que me sonrojaría.
Caminamos del brazo hasta el Inglant V12; era un
auto de líneas fluidas y deportivas, pero no por ello dejaba de ser elegante,
el que se encontraba frente de mi, era negro, con algunos detalles cromados y
los vidrios completamente negros, era tipo sedan, y según yo una verdadera oda de
la modernidad y la belleza automotor. Debía llegar en él según el protocolo
Luna organizo; esa noche no seria Nick quien conduciría sino Ron y yo iría en
el asiento del copiloto.
En ese pequeño espacio de camino, mire a Ron de
arriba abajo, aun deleitándome con su aroma que me noqueo desde el primer
momento en que lo vi. El traje no solo era elegante, sino que también resaltaba
la masculinidad ciento por ciento, lo atlético de su cuerpo, su pecho y altura,
eran mas que nunca visibles, así como sus ojos que destellaban junto a su
cabello. Parecía un príncipe.
Abrió la puerta para dejarme pasar, y luego desde
mi asiento localice a Tonks y Luna, montándose en otro auto del mismo modelo
pero Gris, por ultimo todos los guardaespaldas montaron motos nuevas… aquella
seria una noche extremadamente larga.
***
Ron aparco el carro delante de una alfombra roja,
que tenia periodistas de lado y lado, le hice seña para que esperara un par de
segundos antes de abrirme la puerta, así los periodistas pudrían fotografiar el
auto, por ultimo descendí yo, siendo asediada por los flashes que rebotaban
tanto en mi como en Ron, Luna y Tonks se nos acercaron un par de segundos mas
tarde.
-Comienza la función- susurro Ron detrás de mi, y
supe que cada quien debía hacer su papel a partir de aquel momento.
Tonks estaba completamente alerta, todos los
guardaespaldas habían tomado posiciones y se iban moviendo estratégicamente
entorno a mí y Luna, al mismo momento Ron observaba a todos lados siguiéndome
muy de cerca.
Al entrar al edificio estaba una gran cantidad de
gente reunida esperándome; el Inglant V12 se encontraba en una plataforma,
impetuoso en medio del salón. Severus quien se encontraba cerca de la puerta se
acerco para saludarme rápidamente.
-Te ves hermosa como siempre…- Asentí como
agradecimiento y lo inste continuar- antes del discurso debes saludar a los
Malfoy y al primer ministro Hermione-
-Bien, vamos- lo seguí con Luna y Ron a mi diestra.
Una familia de Rubios platinados se agrupaba
delante de mi; a la izquierda, se encontraba Narcissa Malfoy la matriarca,
sumamente reservada, pocas veces aparecía en publico; al centro Lucius Malfoy,
esposo de Narcissa, alto, y déspota hasta en la forma de caminar; Por ultimo
estaba Draco Malfoy actual director de la compañía de su familia, que cabe
destacar son la mas acérrima competencia de mi empresa. Jamás tuvieron (mi
familia y la de ellos) buenas relaciones, ni siquiera entre mi abuelo Albus y
el de Malfoy, así pues, nos tratábamos con la mayor de las hipocresías al
vernos, y luego financieramente nos arrancábamos los ojos… así era como
funcionaba.
-Hermione Granger estas hermosa- Saludo el mayor
de los Malfoy elogiándome.
-lo mismo digo Lucius, siempre tan elegante- Le di
un corto beso en la mejilla a Narcissa, y luego ofrecí la mano a Draco – Me
encanto haberlos visto, espero que disfruten la noche; disculpen lo rápido del
saludo pero debo hablar con el primer ministro y dar un discurso- Les restregué
con saña, realmente los odiaba.
- Despreocúpate Granger, esperaremos aquí al
discurso, y la presentación de tu nuevo hijo- Draco llegaba a ser insoportable
en la gran mayoría de los caso.
Por ultimo salude al primer ministro y junto a él
un pelirrojo desgarbado y delgado miraba a Ron intensamente, debía ser uno de
sus hermanos, no recordaba su nombre, pero el día que terminamos abrazados en
mi despacho, Ronald lo había nombrado.
-Señor primer ministro, que placer tenerlo esta
noche con nosotros- salude al hombre alto y moreno de semblante bonachón.
-El placer es mió, realmente no me pude aguantar
cuando me dieron la invitación, es un auto precioso el que estas estrenando
querida- Sonreí divertida.
-Bueno, pues no dude en que lo llevare de paseo un
día de estos- el se carcajeo jocoso ante mis palabras y luego se despidió con
dos besos en las mejillas. Me aleje de él y con eso aparté sin mucho ánimo a
Ron de su hermano.
-¿Por qué no saludas a tu hermanos?, no pasara
nada si te alejas de mi un momento- le susurre antes de perdernos en la parte
posterior de la tarima donde minutos después debía dar el discurso de presentación.
-No te preocupes, ya nos hemos saludado, además ésta
no es una noche de placer para ninguno- me guiño un ojo rápidamente, tanto que
incluso dude de que lo hubiese hecho.
-Hermione, están terminando de llegar algunos
periodistas, en unos minutos subes a hablar- asentí a Severus quien estaba
vestido igualmente de esmoquin, y que corría de un lado a otro dando ordenes
junto a Luna.
Un mesonero paso cerca de nosotros con una bandeja
llena de copas de champaña, tome una, y la bebí de un solo jalón ante la mirada
escéptica de Ron.
-Odio hablar en publico- le aclare, el sonrió y
puso sus manos en mis hombros delicadamente, transmitiéndome su calor.
-todo va a salir bien- asentí no muy segura y me soltó,
no sin antes pasar el dorso de la mano por mi mejilla.
Un par de minutos mas tarde, Snape se acercaba rápidamente
a mí.
-¿estás lista?, es tu turno…suerte- literalmente
me empujo hacia las escaleras, que subí aterrada, hasta toparme de frente con
la enorme cantidad de personas que se habían concentrado en el salón.
-quizás debí preparar un maldito discurso- pensé.
Ron se puso a un costado de la tarima y Tonks al
otro, luego me coloque frente al podio y me dispuse a hablar.
-Buenas noches, Damas y caballeros, amigos desde
hace casi cien años.
Desde 1920 Great Bretain ha brindado, primero a
Inglaterra y luego a toda Europa, un medio de transporte capas de trasladar a
las personas a cualquier lugar que se encuentre en el mapa.
Mi abuelo y fundador Albus Dumbledore, jamás pensó
cuando inicio este proyecto de empresa, el alcance que tendría; Poseyendo hasta
la fecha automóviles de esa lejana época
que se encuentran aun en funcionamiento.
Durante casi toda su historia, Great Bretain ha
fabricado automóviles de manera artesanal y en pequeñas series; entre 1957 y 2000 la producción
total de nuestra marca no llegó a doce mil unidades. Estos volúmenes se han
incrementado en años recientes. En 2003, produjimos mil
cuatrocientos setenta y seis, y en 2004 dio un notable
salto a dos mil cuatrocientas unidades
vendidas, acercándonos a la meta establecida de cinco mil autos anuales
para 2006.
En el 2007 fabricamos siete mil doscientos automóviles, un incremento de 6.7%
respecto al 2006.
Pocos son
los que no reconocen a Great Bretain como una de las mejores marcas de
coches de lujo. Sin embargo, los inicios de nuestra firma no fueron fáciles;
primero tuvo que sobrevivir a la
Primera Guerra Mundial, durante la cual
algunos socios se retiraron. Por no ver futuro en el negocio.
Por toda
nuestra historia, tanto empresarial como sentimental con la marca que le ha
dado vida a las carreteras inglesas, hoy queremos dar a conocer el nuevo Ingland
V12, un automóvil con características inigualables, que trae como su mejor
sello de presentación, la cero emisión de gases contaminantes, sin la
utilización de electricidad. Sus líneas deportivas no dejan de ser altamente
elegantes, manteniendo el garbo de nuestra cultura.
Con un
motor de doce cilindros en V y cinco mil novecientos treinta y cinco centímetros
cúbicos, que da quinientos setenta y tres CV de potencia máxima a seis mil
setecientos cincuenta rpm. La caja de cambios es automática de seis relaciones
y logra una aceleración de cero a cien kilómetros por hora en cuatro punto un
segundos. Como pueden apreciar es una obra maestra de diseño e ingeniería
También queremos anunciar una expansión que ocupara
algunos países de Latinoamérica en un principio, y luego la incursión total en
la fabricación de otros tipos de medios de transporte, cuestión que se
encuentra en proceso y pronto podrán disfrutar.
En ultima
instancia quiero dar un agradecimiento a todos los que participaron en el
proceso de creación de nuestro nuevo modelo, desde los diseñadores, hasta los
operadores de maquinas, sin ellos nada de esto seria posible.
Espero no
solo ésta noche sea de su agrado, sino también la dicha de sentir la velocidad
y comodidad por ustedes mismo.
Gracias a
todos por venir- Cuando baje de la tarima
los aplausos no se hacían esperar, Tonks me abrazaba con una gran sonrisa.
-Has
estado maravillosa- Fue Severus el que hablo abrazándome efusivamente.
-Hermione,
estuvo genial- Luna al igual que los demás se encontraba en la pequeña fila de
allegados.
-Gracias
chicos, de verdad sin ustedes esto no seria posible…por cierto ¿Dónde está
Ron?- Era el único que faltaba a mi alrededor, no estaba como siempre.
-Tranquila,
Michael confundió a un paparazzi con un invitado fue a reprenderlo, ya vuelve- asentí
feliz por los resultado de esa noche.
-Hermione
debes saludar a los patrocinantes… y disfrutar de la fiesta- Yo completamente
feliz, después de mucho tiempo, no dude en aceptar.
Habían
muchos patrocinantes, si no me equivoco habré saludado a mas de quince, Luna
había hecho un excelente trabajo, tendría que volverla a recompensar.
Entre los
asistentes estaban dueños de medios, tanto prensa, como televisión y radio,
algunos de ellos, ya habían conversado con Snape para la compra de espacios
publicitarios. También se encontraban un representante menor de la monarquía, quienes
eran asiduos compradores de nuestra marca, y por último personas de alto nivel económico,
quienes se interesaban mucho en el tipo de presentación que estábamos dando.
Luego de
veinte minutos de saludos, besos y carcajadas, volví a buscar a Ron con la
mirada pero seguía estando solo Tonks.
-Nympha,
¿Dónde esta Ronald?- comenzaba a preocuparme su ausencia.
-Ya te
dije, esta controlando algo con Michael-
- ¿Tarda
veinticinco minutos en regañar y controlar una situación?- estaba escéptica
-Weasley
te dio donde era, ¡Menuda preocupación!- ahí iba de nuevo con su burla, ya
comenzaba a hartarme.
-maldición
llama a Ron por el auricular, pregúntale si todo anda bien- mi tono exasperado debió
hacerle entender que realmente estaba preocupada, ya que de inmediato su cara
cambio de semblante.
-Vale…- Apretó
el botón del aparato de su oído – Weasley, Hermione quiere saber donde te
metiste- la vi esperar unos segundos y repitió la misma operación – Repito,
¿donde te metiste Weasley?- Espero de nuevo, pero no me dijo nada, y su cara
volvió a cambiar de preocupada por mi, a una seriedad casi helada.
-¿Dónde
esta Ronald?- Volví a preguntar completamente asustada. Con la mano me hizo
seña de que esperara, mientras con un pequeño radio que tenia en su mano se volvía
a comunicar.
-Michael,
por favor dile a Weasley que la jefa quiere saber donde se metió-
Instantáneamente, se escucho el sonido
borroso del aparato, y la voz de Michael Corner al otro lado.
-Conmigo
no está Tonks-
- Pensé
que había ido a solucionar algún lío en la entrada- dijo de nuevo mi amiga.
-si, aquí
estuvo, pero se marcho rápido-
-Bien,
gracias- volvió a pulsar el botón – ¿Brown, Seamus han visto al jefe?- El radio
sonó de nuevo; mi paciencia estaba acabándose, y el susto que tenia en el
cuerpo me estaba consumiendo.
- No
Tonks, pensamos que estaría con ustedes, no lo hemos visto desde que llegamos-
-Maldición,
chicos Ronald no está con nosotras y tampoco con ustedes, no contesta su
auricular, y tampoco la radio- se escucharon una cantidad de improperios del
otro lado proveniente de todos los chicos – Dejen en sus puestos a los relevos,
vamos a buscar a Ron, y envíen a un grupo para que se queden con Hermione,
Snape y Luna…Muévanse esto es grave, nos vemos detrás del escenario- Cerro el
radio y nos miro a los tres con una falsa tranquilidad.
-Yo no me
quedo aquí, quiero saber donde está Ron- Mi comentario fue tajante y casi histérico.
-Hermione
es peligroso, no sabemos que está pasando así que es mejor que te quedes aquí-
-No, y es
mi última palabra Nymphadora- volví a retar.
-Maldición
Hermione, no es momento para ponerte difícil-
-¡Me
pongo difícil porque soy quien paga todo aquí, y tu eres mi empleada y esto no
entra a discusión, voy y se acabo, es una orden malditasea!- Tanto Luna como
Severus compusieron caras de asombro, jamás había hecho tal cosa, pero la
situación lo ameritaba, luego le pediría disculpas a Tonks por mi imposición.
-Bien…- un
chico de uniforme se coloco frente a nosotros y Nympha le señalo a Luna y
Snape- cuídalos, jamás los dejes solos- me tomo del brazo y me hizo caminar
hasta detrás de la tarima – Hermione te voy a dar un chaleco, necesito que te
lo pongas, vas a hacer todo lo que te diga, y si se presenta una situación tu
te vas a refugiar, pase lo que pase, veas lo que veas…¿De acuerdo?- Asentí para
no darle largas al asunto, quería saber de una vez y por todas el paradero de
mi guarda espaldas.
Nymphadora
me pasó un chaleco que se encontraba debajo de la tarima; me lo coloque a
prisa, al tiempo que ella se quitaba el vestido y se ponía ropa cómoda que se
encontraba en el mismo sitio.
Unos
pocos minutos después llegaron todos los demás completamente listos.
-Chicos,
Hermione viene con nosotros, y no hay mas de que hablar…Michael, Hermione y yo
vamos a ver las cintas de seguridad, Lavender y Seamus busquen los planos del
edificio- Respiro un momento y prosiguió – no sabemos que pasa, así que no
importa que suceda, a Hermione jamás debemos perderla de vista, si en cinco
minutos no sabemos donde esta Ron, Brown, llama a Potter…Muévanse-
Nos
dividimos hacia donde Tonks había ordenado, mientras mi corazón parecía querer
salirse del pecho; estaba aterrada pero no por mi, sino por Ron, el solo hecho
de pensar para él un destino igual al de Dean me hacia estremecer, y unas ganas
inmensas de llorar me azotaban. Pero no debía derrumbarme, necesitaba tener
confianza y fe en que lo encontraríamos, el tenia que estar bien, solo faltaba
saber donde demonios estaba.
***
No hay comentarios:
Publicar un comentario